Viernes 4 de Octubre de 2024
Una reforma legal innecesaria
No sabemos si la reforma de la Ley
de Protección de la Seguridad Ciudadana, que Bildu ha anunciado que tiene pactada
con el PSOE (en este momento no se tiene la seguridad de que el pacto sea con el
Gobierno), llegará o no a buen puerto. Pero hay datos que lógicamente han encendido
un debate activísimo en donde predomina la crítica más severa (vid. prensa de
hoy).
En esta nebulosa, tan típica de las
estrategias gubernamentales, nos conviene señalar que el PSOE ha manifestado
que la reforma es necesaria y que se hará dentro de los límites
constitucionales. Y es en este aspecto donde las alarmas se encienden. Primero,
porque los cuerpos de seguridad del Estado no han manifestado esa necesidad y
menos si la reforma va dirigida a dificultar su actuación en un ambiente
claramente tendente a la agravación y aumento de la inseguridad ciudadana. Y
segundo, porque las reformas legislativas importantes que se han hecho por
los gobiernos del Sr. Sánchez se han apoyado en pactos con partidos políticos
que están claramente fuera del orden constitucional, de donde la experiencia
nos muestra que las leyes que han surgido de ellos son cesiones a los intereses
particulares de determinados partidos políticos, muy alejados de los intereses generales,
amén de encerrar no dudas, sino certezas de inconstitucionalidad.
Como no vamos a prejuzgar, sí es exigible que
esta reforma con carácter de Ley Orgánica se tramite por el procedimiento
legislativo ordinario: es decir, que exista un anteproyecto del Gobierno, que
se dictamine por los órganos estatales interesados, que se discuta en Ponencia
y posteriormente en Pleno. Todo lo que no sea eso, sin prejuzgar nada, podemos
decir con certeza que será otro fracaso del Estado de Derecho.
Valentín Cortés