Jueves 13 de Marzo de 2013
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la mala imagen de la Justicia.
He leído en www.larazon.es que el CGPJ ha archivado un
expediente sancionador contra el Juez de Santiago de Compostela que conoció del
célebre hurto del Codice Calixtino.
El acusado recusó al Juez y éste, como dicen los clásicos, ni corto ni perezoso, resolvió por sí y
ante sí la recusación y la rechazó. Cabe recordar que la recusación la resuelve
siempre otro Tribunal distinto al recusado y que tiene como efecto inmediato,
solo su planteamiento, la separación del juez recusado del conocimiento del
asunto (arts. 217 y ss de la Ley Orgánica del Poder Judicial, LOPJ).
Este es un caso claro de “ignorancia
inexcusable”, que la LOPJ (art 417,14 de la LOPJ) tipifica como falta muy grave.
Sin embargo, el CGPJ archiva; el único que sale beneficiado es el Juez
que cometió esa falta muy grave. La Justicia sale enormemente perjudicada
porque se traslada a la sociedad que no hay causa suficientemente grave para que,
quitando honrosas excepciones que trascienden a la política, se castigue a un
juez que o bien ha actuado con dolo o bien no merece ser juez por la ignorancia
que lo adorna.
Valentín Cortés