Martes 28 de Enero de 2014
Será inevitable que se plantee el problema de la responsabilidad de
los jueces y magistrados.
Judicializar la política trae a la palestra y a la discusión problemas
muy variados. Si las fuerzas políticas entienden que acudir a la Justicia puede traer réditos políticos,
es evidente que cada vez se utilizará más a la Justicia para conseguir fines políticos
con independencia del calado jurídico que puedan tener los temas que se judicialicen.
¡La posibilidad de moderar esta tendencia está solo en manos de los jueces!
Digo esto porque hemos sabido, por la prensa de hoy, que la Comunidad
de Madrid ha renunciado a su programa de privatización de la gestión de algunos
hospitales de Madrid. Y lo ha hecho, no tanto porque la Justicia haya decidido
que el programa es ilegal, sino porque se admitieron hace un año medidas
cautelares de suspensión del programa hasta tanto no se resuelven las demandas planteadas,
y aun no se han resuelto y presumiblemente la decisión sobre el fondo tardará muchos años
más.
No critico que se hayan tomado las medidas de suspensión, lo que
critico es que se tarde tanto tiempo en resolver un problema, con suspensión incluida,
que afecta a uno de los puntos básicos de un programa político aprobado por mayoría
absoluta en las urnas. Porque de esta manera, una medida cautelar puede impedir
llevar a cabo el programa electoral; y pudiera ser que, tras muchos años, la
sentencia admitiera la legalidad de la medida política acordada por cualquier gobierno.
¡Gran éxito al margen de las urnas!
Por eso, será inevitable que pronto surjan voces exigiendo responsabilidad
real a los jueces por su actuación y por su inacción.
Valentín Cortés
.