Martes 4 de Abril de 2017
La crítica a los aforamientos
No sé las razones por las que el ya
ex presidente de la Comunidad de Murcia ha dimitido de su puesto de presidente,
pero no de su condición de diputado regional. Tampoco me interesan si nos
atenemos al objeto de este blog.
Pero, sí sé cuál es el resultado procesal
de mantener la condición de diputado: sigue como aforado y, por consiguiente,
sus posibles imputaciones por los delitos que se investigan en un Juzgado de Murcia
y en la Audiencia Nacional, no las conocerán estos juzgados, sino el Tribunal Superior
de Justicia, que hasta ahora no se sabe qué es lo que piensa de todo esto. Los
otros sí: quieren imputarlo.
Es decir, el aforamiento se
presenta, no como una institución procesal con contenido político (salvaguardar
la posición política privilegiada, por razón de su cargo del diputado), sino
fundamentalmente como institución con contenido exclusivamente procesal que
permite un rechazable plus de oportunidad para el político o el aforado, pues,
de hecho y de derecho, se le da la posibilidad de escoger al Juez que lo va a
Juzgar. Ese plus no lo tienen el resto de los ciudadanos.
Quizá en el futuro, la legislación,
que algún día ha de llegar, debería mantener el aforamiento en todo caso, privando
de aquella posibilidad a los aforados, aunque hayan dimitido de su cargo.
Valentín Cortés