Valentín Cortés Domínguez

Valentín Cortés Dominguez es Catedrático de Derecho Procesal. Ha sido abogado con 47 años de experiencia, conferenciante y autor de múltiples publicaciones jurídicas y de manuales de derecho procesal que son libros de texto en distintas universidades españolas y de América latina.

jueves, 18 de febrero de 2016


Jueves 18 de Febrero de 2016 

El torso desnudo de la Sra. Maestre.

No sé qué dirá el Juez a la hora de dictar sentencia, sobre un hecho que está admitido; porque  la Sra. Maestre, en el asalto a la capilla de la Universidad Complutense en el campus de Somosaguas, además de proferir otras lindezas verbales, en forma de consignas, desnudó su torso, y ha declarado en el Juzgado en relación a ello que “un torso desnudo no tiene por qué ser ofensivo” (eso recoge toda la prensa digital de esta tarde). ¡Por supuesto!, diría yo; pero ese no es el problema: el problema es si puede serlo, en las circunstancias que se dieron en ese momento.

 Por eso, el Juez del caso puede decir, desde que es manifestación del derecho a la libre expresión del pensamiento (comunicación no verbal en este caso del pensamiento), hasta que es manifestación artística, o incluso que no se trata sino de una clara muestra de protesta política, quizá desafortunada en las formas, pero irreprochable en el fondo. Incluso puede decir que la Sra. Maestre ha sido perdonada (me imagino que en un ejercicio de misericordia y caridad cristianas) por el Obispo de Madrid, de modo que por qué no aplicar la doctrina del perdón del ofendido, haciendo que el ofendido sea el obispo o la Iglesia. A todo estamos acostumbrados.

El juez puede decir, me temo, pero es una realidad, lo que quiera; pero no tendrá más remedio que entrar en el meollo de esa declaración hecha hoy por la Sra. Maestre: ¿fue ofensivo para los católicos, en general, y para los asistentes en ese momento a la Misa que se estaba celebrando, que una Sra. se desnude, llevando a cabo la actuación que consta en la causa?

Deseo hasta límites insospechados que el juez tenga sentido común y estoy convencido que lo tendrá.

Valentín Cortés