Lunes 4 de Diciembre de 2023
El Consejo General del Poder Judicial, en funciones
La prensa de hoy da cuenta de que
el CGPJ cumple cinco años en funciones. Esta es una anomalía constitucional que,
sin ningún género de dudas, se nos antoja ciertamente grave.
Es mucho más grave que por ley se haya privado al Consejo, que está en funciones,
que desarrolle algunas de ellas que son de una importancia vital para el buen
desarrollo de la función jurisdiccional; y aún más que esa mutilación de
funciones se haya debido a que una parte de las Cortes, necesaria para llevar a
cabo la renovación de los miembros del Consejo, ha querido presionar de esa
manera a la otra para que, precisamente ésta última llegue a un acuerdo que,
por lo que se ve, no quiere alcanzar. De donde se deduce que la situación de “en
funciones” no es el obstáculo insalvable para que el Consejo funcione
normalmente, sino la ley posterior que se aprobó.
Obligar a alguien a llegar a un
acuerdo, que no quiere alcanzar con el contenido que se le plantea, es un
imposible jurídico, pues no sería acuerdo, sino imposición. Quizá la única postura
para que la Justicia (y por ende el Estado) no sufra la falta de acuerdo, sea devolver
al Consejo todas sus competencias. Recuperadas éstas, será de nuevo el momento
de promulgar una ley que impida que la renovación
del Consejo esté en manos de los partidos políticos, pues siempre antepondrán
sus intereses partidarios a los intereses constitucionales del Estado.
Valentín Cortés