Jueves, 30 de Mayo de 2013
El papel que se quiere asignar a los Fiscales en la futura instrucción
de las causas por delito.-.
En una mesa de debate sobre el anteproyecto que se está estudiando en el
Ministerio de Justicia de Código de Proceso Penal, parece ser que los que debatían,
personalidades todas de la judicatura, fiscalía y del Derecho, estaban de forma
general a favor de conceder a los fiscales la competencia para instruir causas
penales, apartando de esta función a los jueces de instrucción, que quedarían
como una especie de jueces de garantía
para decidir la adopción de medidas cautelares de tipo
personal y patrimonial y la apertura del
juicio oral(www.eleconomista.es)
Es evidente, así lo admitió el Fiscal General del Estado, que con la
actual estructura y concepción de la
Fiscalía eso no sería posible, pues es claro que existe dependencia, dentro del principio de
legalidad, al Poder ejecutivo. Cambiar funcional y orgánicamente al Ministerio
Fiscal para hacerlo independiente del Poder Ejecutivo es una reforma en
profundidad y de enorme coste, que no se puede hacer sin el acuerdo de la gran
mayoría del arco parlamentario, porque significa cambiar conceptualmente una
parte tan importante del proceso penal como es la instrucción.
Si al mismo tiempo se pone coto a las dilaciones en la investigación,
si se da otra dimensión a la acción popular (privando de ella a partidos
políticos y sindicatos, por ejemplo), si se evitan los juicios paralelos, si se
establece el principio de la responsabilidad (civil, penal y administrativa) de
los Fiscales como esencial del sistema, entre otras cosas, quizá merezca la
pena intentar este cambio.
Valentín Cortés