Martes 25 de Enero de 2022
La voluntad política y la Constitución
Leo en www.elmundo.es que el portavoz del Gobierno ha
manifestado que, en caso de que se convalide el Decreto-Ley de reforma de la legislación
laboral, el Gobierno no piensa tramitarlo como proyecto de ley. Ya sabemos cual
es el lío político que hay debajo de todo esto, pero eso ahora no nos interesa
por no ser de nuestra incumbencia.
Es curioso cómo el Gobierno ha asumido
que no debe “entretenerse” con los inconvenientes constitucionales que le
surgen a la hora de sacar adelante sus intereses políticos, que son ahora denominados
“voluntad política del Gobierno”. Nosotros estamos de acuerdo en que el
Gobierno debe, si puede, sacar adelante, en su acción de Gobierno, lo que son
sus intereses políticos y lo que es su voluntad política; basta leer el art. 97
de la Constitución para darse cuenta de que el Gobierno está legitimado para
ello. Pero, claro está, cumpliendo la Constitución: un pequeño inconveniente
para este Gobierno. Porque, ¿Cómo pretende el Gobierno justificar la
extraordinaria y urgente necesidad de legislar con el RDL la reforma
laboral vigente desde hace años, después de tantos meses en el poder?, porque ese
es el inconveniente que le pone el art. 86.1 de la Constitución a la acción
de Gobierno para legislar y regular a través de RDL, que no son sino los
requisitos para su convalidación y eficacia constitucional.
Valentín Cortés