Miércoles, 29 de Mayo de 2013
La ocurrencia de la Junta de Andalucía sale cara.-
Cuando a la Junta de Andalucía se le ocurrió aquella medida, totalmente
alejada de una sociedad anclada en la economía de libre mercado y en el Estado
de Derecho, como la expropiación temporal de pisos desocupados en manos de
entidades financieras, ya dijimos que rompía, además de nuestra Constitución,
las normas del mercado y que ello tendría consecuencias.
Ahora leo en www.expansion.es que la Agencia de ráting Fitch ha puesto en perspectiva
negativa a los bancos afectados por esta medida( todos los españoles, me
imagino) porque, con razón afirma la Agencia, la norma andaluza afecta a las titulaciones y cedulas
hipotecarias de los mismos.
Me imagino que la reacción de la Junta de Andalucía será de desprecio
y descalificación. Se equivocaría si fuera así, porque ese daño gratuito a las
entidades financieras tendrá, a medio y largo plazo, un coste para los ciudadanos
que viven en Andalucía.
Todo esto es, además de gratuito, innecesario porque cualquiera (no
sectario) que lea, como yo he hecho, la
Ley 1/2013 de medidas para reforzar la protección a los deudores hipotecarios, reestructuración
de deuda y alquiler social (BOE de 15 de Mayo), llegará a la conclusión de que pone en manos de las personas que están en ese
umbral de la exclusión social un remedio digno, que es aceptado por las entidades
financieras y que no tiene el coste económico en los mercados y en la deuda
española.
Creo que el Gobierno debería acudir al Tribunal Constitucional para
solucionar este problema. Claro es que yo solo manejo criterios jurídicos y, en
este caso, económicos para dar esta opinión
Valentín Cortés