Viernes 17 de Febrero de 2017
La
sentencia del caso Noos y las declaraciones del Ministro de Justicia sobre los
fiscales de Murcia
Opinar jurídicamente sobre la
sentencia del caso Noos, que al parecer tiene más de 1000 folios, me parece un
imposible metafísico; decir, como dicen todos, que es la demostración de que la
“Justicia es igual para todos”, puede
parecer un hallazgo, pero en realidad es pura obviedad, siempre que se afirme después
de haber leído la sentencia, cosa que nadie ha hecho hasta ahora por
imposibilidad igualmente metafísica. De donde se deduce que cualquier
comentario jurídico sobre el tema está de más.
Por eso hoy me referiré a las declaraciones
del Ministro Catalá cuando dice, frente al aluvión político de críticas y dudas
sobre las presiones del Ejecutivo a los fiscales de la Rioja y de Murcia por
las órdenes recibidas de los Jefes, para no investigar a los respectivos presidentes
de las autonomías, que el problema lo tienen los fiscales que no han querido obedecer a sus jefes, cuando éstos han decidido
que no se acuse.
Los que sostenemos, que la Fiscalía
debe instruir los procesos penales, no nos podemos imaginar ni una institución dependiente
del Gobierno, ni a los fiscales fuera del orden jerárquico, y, por
consiguiente, sometidos a las órdenes del Jefe, porque si aquellos sostienen
que pueden hacer lo que quieren o piensan, cada uno lo que estime conveniente
en la instrucción que les toque llevar, estarán definitivamente condenando a
que la instrucción la lleven los jueces, que ofrecerán más garantías de independencia
e imparcialidad.
Pero lo sorprendente es que alguien
pueda ser fiscal y no aceptar la orden del Jefe; por eso tiene razón el
Ministro cuando dice que el problema lo tienen los fiscales desobedientes. Lo
que, dicho de paso, es una obviedad, que, curiosamente, hay que resaltar.
Valentín Cortés