Jueves 30 de Noviembre de 2023
La legitimidad en el
pensamiento de la Presidenta del Congreso
La prensa da debida cuenta de los
términos del discurso de la Presidenta del Congreso en la apertura conjunta
ayer de la nueva legislatura en ambas Cámaras. No voy a entrar, lógicamente, en
el comentario político que hace la prensa y me atendré a dar mi opinión jurídica.
Tiene la Presidenta un concepto de “legitimidad”
ciertamente rudimentario. Para ella la decisión sobre la ley de amnistía (sobre
cualquier ley, me imagino) “es legítima porque emana de la voluntad
ciudadana”. Digamos que en nuestra Constitución la voluntad ciudadana
no existe; existe “la soberanía nacional que reside en el pueblo
español, del que emanan todos los poderes del Estado (art.1.2 Constitución), también,
lógicamente, del Legislativo. Pero eso no significa que el Poder Legislativo
pueda hacer lo que quiera, porque esa soberanía nacional le viene dada al Poder
Legislativo, como a los demás, con la condición que se sujete (atenga),
en su actuación, a la Constitución y al resto del Ordenamiento Jurídico (art.9.1
Constitución). Lo contrario sería ir contra la soberanía nacional, que reside
en el pueblo español, que ha establecido esa condición y límite, en la
Constitución, otorgada y aprobada por ese pueblo. De modo que las Cortes no están
legitimadas sin más para hacer y promulgar la ley que quiera: lo estarán si se
atienen y sujetan a la Constitución. El pensamiento de la Presidenta tuvo un gran
protagonismo en Alemania con el advenimiento
del nacional-socialismo, que, como dijo Radbruch,
estaba dispuesto a “eludir la exigencia que caracteriza especialmente a la
justicia: el tratamiento igual de lo igual”, de donde “no se trata de un
derecho injusto sino que no es en absoluto derecho”. En esa situación no puede
haber legitimidad alguna.
Valentín Cortés