Jueves 8 de Febrero de 2018
Un
debate poco serio
Esta mañana he leído en www.elmundo.com una noticia que me ha
sorprendido que pueda tener acogida mediática mínimamente seria. Afirma la
noticia que expertos y profesionales (de una muy amplia diversidad de clases: forenses,
psicólogos, abogados, profesores de Derecho, etc.) han manifestado que la pena
de prisión permanente revisable es inútil porque no hace disminuir la delincuencia
en esos casos concretos. Se trata, por una parte, de una obviedad; y de otra,
un ejercicio de sin razón, porque de esta pretendida falta de efecto reductor
del número de delitos no cabe deducir la inutilidad de la pena. Si eso fuera así,
podríamos decir que el Código Penal y el derecho sancionatorio son inútiles en
su conjunto, pues cada vez se cometen más delitos y hay más personas en prisión.
La eficacia preventiva en la
criminalidad no hay que buscarla en la regulación que se haga de las penas,
sino en otras medidas educacionales, sociales, económicas, etc., que nada
tienen que ver con el Derecho, y, también, en las medidas cautelares de privación
de libertad que pueda adoptar el Juez.
En este debate creciente sobre la prisión
permanente revisable se debería tener en cuenta que la pena se establece por el
Derecho para castigar determinadas conductas, para reparar en lo posible el
daño causado y para preservar a la sociedad del criminal, o delincuente,
durante un tiempo razonable, aprovechándose este tiempo de aislamiento social
para intentar regenerar al delincuente.
Valentín Cortés