Martes 26 de Diciembre de 2017
La
Ética y el Derecho en la clase política
La Presidenta de Andalucía ha
insistido, en estos días de mensajes navideños, y sin decirlo directamente, en
la idea de la supremacía de la Política sobre el Derecho. Ha manifestado, sin
pudor ante las cámaras de televisión, que los Sres. Chávez y Griñán son “honestos y decentes” y que “nadie puede decir que se hayan llevado un
duro”.
Por supuesto que el Derecho no es
coincidente con la Moral, pero, en cambio, la Ética siempre ha estado asociada a
los convencionalismos sociales protegidos por el Derecho. En un Estado de
Derecho no hay Ética fuera del Derecho.
En esas declaraciones de Susana
Diaz, como ocurre mutatis mutandi con
lo que oímos a diario de los independentistas catalanes, lo político se sitúa
mas allá del Derecho, porque, para ella, un comportamiento antijurídico puede
ser ético siempre que el concernido no se haya directamente enriquecido.
Es asombroso observar cómo se pueden
degradar el Derecho y la Ética cuando los políticos tratan de proteger intereses
de los suyos, pues intentan conseguir que la violación del Derecho no sea éticamente
rechazable; el paso siguiente será acomodar y asentar esa idea de la Ética en
el Derecho que a ellos concierne. Por eso citaba antes a los independentistas
catalanes.
Valentín Cortés