Viernes 13 de Octubre de 2023
La negociación para la
investidura del Sr. Sánchez con Bildu
Si nos quedamos muy en la epidermis
de la Constitución, el mero hecho de que el Sr. Sánchez este negociando con
Bildu, o con los secesionistas catalanes, su investidura no merece ningún
reproche constitucional puesto que son grupos parlamentarios que provienen de partidos
políticos hoy legales en España. Como es lógico, otra cosa es que en la negociación
se ceda y se admita algo que no es constitucional, como, por ejemplo, la amnistía
de la que tanto se habla y hemos hablado.
En el caso de Bildu, posiblemente
no esté sobre la mesa ninguna petición que formalmente sea en sí misma
anticonstitucional, o al menos eso es lo que deduzco de mis lecturas de la
prensa. Sin embargo, la mera existencia de la negociación, sea cual sea el
objeto que pueda tener, es, en sí misma, intolerable desde el punto de vista
constitucional y de respeto al Ordenamiento Jurídico.
En la actualidad existen centenares
de asesinatos de Eta que no se han aclarado, fundamentalmente, porque lo que
ahora es Bildu (es decir, posiblemente una gran parte de sus componentes y
dirigentes) no colaboran con la Justicia; en la opinión pública nadie duda de
que personas que dirigen esta formación conocen los entresijos de muchos asesinatos
que ahora mismo están impunes. Y, si es así, aquí chocaríamos con la Constitución, que (art.118 Constitución) nos obliga a todos a colaborar con la Justicia, y con
el Código Penal (art. 451), que califica como delincuentes por encubrimiento
precisamente a los que intervinieren ayudando a los presuntos responsables a
eludir la investigación criminal de la autoridad o de sus agentes.
Si a esto se añade que nunca esta
formación ha pedido perdón o ha reconocido el carácter asesino de su comportamiento
como ETA, creo que existen, no sólo condicionantes políticos para no negociar
con ella, sino claros condicionantes jurídicos y constitucionales.
Valentín Cortés