Miércoles, 21 de octubre de 2015
La inercia
He
leído en ABC, edición Andalucía, que el Consejo Fiscal avisa al Ministro de
Justicia de que no puede controlar los plazos de trescientas setenta mil causas
penales, a efectos de determinar cuáles son simples y cuáles complejas. La
nueva LECrim establece que las simples tendrán un periodo máximo de instrucción
de seis meses y las complejas de dieciocho.
Es
curioso que, siempre, la nueva ley, con independencia de su bondad o no, si
requiere un esfuerzo adicional de alguien, produce una inercia negativa
importante que tiende a no cumplirla.
No sé
cuántos casos lleva cada uno de los fiscales que hay en España (hay más de
2.300 fiscales), pero si se nos dice que no pueden clasificar las causas que
llevan cada uno de ellos, me temo que el problema es que no las conocen. Y,
entonces, el problema no es la ley, sino la Fiscalía.