Viernes 2 de Diciembre de 2022
Una buena ocasión para el Defensor del Pueblo
Ayer noche el Congreso rechazó, como
estaba previsto, las enmiendas a la totalidad del proyecto de reforma del Código
Penal (delito de sedición) que presentaron los partidos que mantienen la
necesidad de no suprimir tal delito.
Los argumentos para rechazarlas han
sido tan absolutamente peregrinos, faltos a la verdad y lejos de la realidad de
todo Estado de Derecho, que no merece la pena detenerse en ellos; y yo no me
voy a detener ni un segundo en hacerlo.
Todo indica que la reforma del Código
Penal será una triste realidad antes de fin de año. Y todo indica que, de
inmediato, se presentaran los correspondientes recursos de inconstitucionalidad
del PP y de Vox, que son los únicos grupos que podrán hacerlo. Pero sería bueno
que, en concreto, el Defensor del Pueblo apareciera ante la sociedad como tal e
interpusiera también el recurso, para lo que tiene la legitimación que le
otorga el art. 162.a de la Constitución. Porque la reforma de la sedición no sólo
es un desarme del Estado de Derecho y una norma ad hoc, que va dirigida
a favorecer a determinadas personas, perfectamente identificadas, y a sustentar
los particulares intereses de un
Gobierno, que de otra manera no habría aprobado los Presupuestos de este
año, sino que es un ataque a la sociedad y a cada uno de sus componentes, los ciudadanos
españoles integrantes del Pueblo Español, que quedan sometidos al riesgo de
cualquier golpe de Estado que se quiera preparar y llevar a cabo, sin que el
Estado pueda, siquiera sea, amenazar con penas disuasorias a sus organizadores
Valentín Cortés
P.S. Dado el calendario de fiestas de la semana
que viene, la próxima entrada en este blog será el lunes 12 de Diciembre de
2022. Hasta entonces, pues.