Miércoles 8 de Noviembre de 2017
¡Un gran País!
Hoy se ha anunciado que el Tribunal
Constitucional ha anulado la declaración de independencia y la llamada Ley de transitoriedad
catalana. Salvo error de mi parte, con las nulidades declaradas hoy, se ha
acabado con el entramado ilegal normativo que implicaba y permitía la declaración
de independencia.
Hace unos días fue disuelto el Parlamento
catalán y depuesto el Gobierno de la Generalidad, que han sido los órganos de
la Generalidad que han propiciado esta cadena de actos ilegales. Y han quedado
disueltos los órganos que permitían o coadyuvaban a todo ese proceso.
Los órganos judiciales, por su
parte, están depurando las responsabilidades penales de los autores de estos
hechos.
Visto con la perspectiva y
distancia necesarias no podemos tener la menor duda de que el Estado de Derecho
ha actuado perfectamente.
Repuesta la legalidad
constitucional, sólo queda que el pueblo elija un nuevo Parlamento de donde
surja el nuevo Gobierno.
No creo que nadie pueda acusar a este “contraproceso”
de inconstitucional, y será difícil que alguien pueda negar el carácter plenamente
democrático de nuestro sistema que permite esta solución plenamente democrática
y legal a un problema gravísimo. Me imagino que es para estar satisfechos.
Valentín Cortés