Lunes 13 de Septiembre de 2021
La “diada” y los indultos
Algunos medios periodísticos (por
ejemplo, vid. www.republica.com)
aventuran que, tras el “fracaso” de las manifestaciones en Barcelona el pasado sábado
día 11, el comportamiento social de la sociedad catalana justificaría los
indultos concedidos por el Gobierno a los condenados por sedición, reapareciendo
así, en los próximos días, la corriente social-política-periodística, bien
definida de antemano, favorable a los indultos aprovechándose de este dato.
Pudiera ser que se trata de ejercer
presión, o de la voluntad de hacerlo, para inclinar al Tribunal Supremo (Sala
Tercera) en la decisión que tiene que tomar en relación con la legalidad y constitucionalidad
de los indultos otorgados. En definitiva, el argumento sería que los indultos
han propiciado una via de solución del problema del secesionismo catalán y que,
por tanto, han sido de gran utilidad pública.
El problema, tal como está
planteado, no tiene presentación posible en el ámbito del Derecho (que es donde
estaría el Tribunal Supremo), pues parte de la idea inasumible de que hay que
perdonar al delincuente porque su delito se justifica o se admite por una parte
de la sociedad, aunque se rechace frontalmente por la mayoritaria. No creo que
este argumento tenga recorrido en el seno del Tribunal Supremo, máxime cuando los
medios de comunicación han publicado en estos días pasados que, en el programa
de reformas legales del Gobierno, no entra la de modificación de la penalidad
del delito de sedición. Si los indultos hubieran tenido esa utilidad pública,
lo que se justificaría en esa línea de pensamiento, sin duda, sería despenalizar
la sedición o reducir sustancialmente su pena, lo que vemos que no es el caso.
Valentín Cortés