Jueves 23 de Mayo de 2019
Una prevaricación inimaginable,
pero cada vez más probable
El fin de este blog es hacer
comentarios jurídicos; por consiguiente, no nos compete analizar políticamente todas
las jugarretas pseudo jurídicas que la
Presidenta del Congreso está haciendo desde antes de ayer, para soslayar la imperiosa
aplicación del Reglamento del Congreso que, ya vimos el martes pasado, impone
la suspensión de los enjuiciados por rebelión que han sido elegidos diputados
en las últimas elecciones.
Desde el punto de vista jurídico,
la posibilidad de que la mesa del Congreso (sus miembros conformadores de la mayoría,
que han decidido hoy pedir informe a los letrados de lo que no es necesario
informar, como tampoco lo eran comunicación o petición algunas al Tribunal Supremo
ayer) transite por el camino de la prevaricación es algo insólito, impensado y no querido
por nadie, pero cada vez más probable, dado el comportamiento ( muy parecido en
eso, por cierto, al de los independentistas durante todo el “proceso”) que la
Presidenta y la Mesa han adoptado, creyendo, sin duda, que en este campo es
rentable el cortoplacismo político.
Valentín Cortés