Viernes 20 de Marzo de 2020
El Sr. Torra agranda el
incumplimiento de sus obligaciones
constitucionales y legales
La mezcla del mundo independentista
(con el Sr. Torra a la cabeza) y la plaga del coronavirus, irremediablemente, está
demostrando que la perversidad y deslealtad del primero no se contiene ni
siquiera con la triste mortalidad del segundo. Hablo, dentro de lo que es el
objeto de este blog, de deslealtad constitucional (que han puesto de manifiesto
la prensa de todo el país y algunos ministros del Gobierno) por las
manifestaciones del Sr. Torra a la BBC británica y por las cartas acusatorias de
éste a la Unión Europea denunciando que el Gobierno español no se atiene a las
recomendaciones y observaciones de la Organización Mundial de la Salud, a lo que
se unen las perturbaciones y falta de colaboración
o entorpecimiento de la Generalizad de las que hablábamos en días pasados. La
respuesta política, a tanta iniquidad, de la Unión Europea se puede leer en www.elespanol.com de hoy.
Desgraciadamente nuestro texto
constitucional, tan lleno de buenas intenciones, no sanciona la deslealtad
constitucional de manera expresa, pero sí que ella es un índice claro de la
falta de cumplimiento de las obligaciones constitucionales de una determinada
autoridad cuando va acompañada de actos de entorpecimiento, falta de colaboración
o por la propagación de noticias que son falsas (vid. las declaraciones del Sr.
Torra en la BBC). Opino que, cada día con más razón, parece necesario acabar con
este estado de cosas con el mecanismo que la propia Constitución da en el art.
155, sin que haya que esperar a la sentencia de inhabilitación del TS.
Valentín Cortés