Martes 1 de Marzo de 2016
¡Ya ha llegado la lectura jurídica del
Sr. Homs!
El pasado 17 de Febrero ya hice una entrada opinando
sobre las palabras del Sr. Homs al hilo de la admisión a trámite en el Tribunal
Constitucional del recurso del Gobierno contra la creación de la Consejería de Exteriores
de la Generalidad de Cataluña. Dijo entonces el Sr. Homs, en plan absolutamente
conciliador, que, con el recurso, “deberá
hacerse alguna lectura jurídica”.
Ya saben ustedes que mantengo que
las autoridades de la Generalidad son maestras en el arte del fraude a la Ley,
al que confunden con la “astucia”; ya lo dije ese día: “me temo que (se) irá por el
camino de añadir más “astucia”, lo que es lo mismo, enrevesar el fraude, que
seguirá siendo fraude”.
Hoy leo en toda la prensa digital
que la Generalidad le ha cambiado el nombre a la Consejería de Asuntos Exteriores.
Por cierto, un nombre realmente enrevesado y gramaticalmente imposible que no
reproduzco. Es una solución a la par que astuta,
claramente fraudulenta, pues la forma (en este caso, el cascarón) no obvia, en
Derecho, al fondo, al espíritu, si queremos, a la causa o finalidad última que
se persigue con las normas que se promulgan.
Valentín Cortés