Lunes, 2 de Abril de 2018
Mucho
camino aún por recorrer
En todos estos días de Semana
Santa, bombardeados por las noticias y comentarios que nos han llegado sobre la
detención del Sr. Puigdemont en Alemania, se nos ha puesto en claro las
deficiencias y carencias del sistema europeo de las órdenes de detención europea.
El sistema hace posible que el juez
requerido examine la bondad democrática del país de procedencia de la orden y
que, por ende, se especule y decida sobre la posibilidad de un juicio justo
para el concernido tras la detención y puesta a disposición del juez requirente.
Todo esto se me antoja absurdo
entre Estados que están en la Unión Europea, a los que, sólo por ello, se les
debe atribuir, de forma incuestionable, su naturaleza plenamente democrática lo
que conlleva la utilización de procesos en donde están garantidas a priori
todas las libertades y derechos de los detenidos y enjuiciados.
Mucho, pues, hay que recorrer para
alcanzar la unidad que se persigue dentro de la Unión Europea.
Mañana, tendremos noticias de la
primera especulación que harán las autoridades judiciales alemanas sobre
nuestro sistema procesal.
Valentín Cortés