Viernes 27 de Enero de 2017
El
ex senador Vidal
Lo más sorprendente de las declaraciones
del Sr. Vidal, que hoy recoge toda la prensa, siempre desde el punto de vista jurídico,
es que provienen de un señor que es juez, aunque en la actualidad suspendido
por el Consejo General del Poder Judicial. Admitir, tal como lo ha hecho, que
sus correligionarios en el Gobierno catalán tienen controlados, según sus ideas
políticas, a todos los jueces con
sede en Cataluña, admitir que aquellos han cometido delito al apoderarse de datos
reservados y que, por último, es obligado (y, diría yo, ¿astuto? ), hacerlo pues, dice, el Gobierno de la Nación nunca daría esos datos necesarios para la marcha de
la independencia, demuestra una de estas dos cosas: o que el independentismo
deteriora la sensibilidad y percepción jurídicas y legales de sus militantes; o
que, en su caso, el proceso de selección judicial no funcionó con el Sr. Vidal. Las dos posibilidades que planteo,
se puede observar, son graves y, me atrevo a decir, pueden ser coincidentes.
Lo que no parece probable es que
este señor estuviera de “bravatas”
inventándose “astucias” impactantes.
Si fuera así, demostraría, además de una de las anteriores cuestiones planteadas
teóricamente (o de las dos), que el independentismo está en fase terminal, pues
recurre, o piensa recurrir, a la amenaza a la ciudadanía y al orden judicial; lejos, pues, de la convicción.
Valentín Cortés