Lunes 26 de Febrero de 2018
La libertad de expresión
He leído en www.europapress.es unas
manifestaciones que ha hecho el Sr. Rivera(Ciudadanos) en las que, referidas a
los escraches y protestas de ciertos ciudadanos y a las posturas adoptadas por las autoridades
catalanas, con motivo de la inauguración del Mobile World Congress, mantiene(
el Sr. Rivera) que se tratan de “protestas
legítimas” contra el Rey y, relacionando estos hechos, con los ocurridos en
la manifestación de Agosto en Barcelona
contra el terrorismo integrista, califica todas estas actuaciones de “mala educación”.
Que el Jefe del Estado sea un Rey y
que España sea una monarquía es opinable, por lo que son legítimas las posiciones
políticas que se puedan producir en contra y entran dentro de la libertad de expresión
y del marco constitucional propiciar e intentar el cambio.
Lo que no es opinable ni atacable,
ni puede ser objeto de menosprecio ni de afrenta, se haga de la forma en que se
haga, es la figura del Jefe del Estado porque
es el símbolo de la unidad y permanencia
del Estado (art. 56.1 de la Constitución) y porque la persona que encarna
la Jefatura del Estado es inviolable (art.56.3
de la Constitución).
Quizá sea el momento de que el
Tribunal Constitucional marque los limites concretos de lo que se entiende como
libertad de expresión para que se aplique correctamente un derecho sacrosanto
que no puede eliminar, entre otras cosas, los valores constitucionales que
recoge la Constitución en el art. citado.
Valentín Cortés