Martes 7 de Septiembre de 2021
La apertura del Año judicial
La apertura ayer del año judicial
nos sirve a nosotros de tema para empezar también nuestro nuevo curso de
opiniones jurídicas.
No se trata, como afirmaba ayer un
medio de prensa, manipulando la información, de que la Justicia esté “en funciones”, sino de que este nuevo año
judicial se inicia, como los inmediatamente anteriores, con el órgano de
Gobierno de la Justicia en situación de “en funciones”, que, como se
comprenderá, es algo muy distinto, pues la situación en la que se encuentra el
Consejo General del Poder Judicial no deslegitima en absoluto la función jurisdiccional
que desarrollan los jueces y tribunales ( por cierto, el único Poder del Estado
que funciona, paradójicamente, con cierta normalidad).
En una situación política como la
que nos encontramos el sistema actual de nombramiento de los miembros del
Consejo no funciona, es evidente, porque los dos únicos partidos políticos, que
pueden conformar en las Cámaras la mayoría exigida por la Constitución (art.122.3),
desconfían el uno del otro. La desconfianza está, según se puede advertir, en
que se piensa que las personas propuestas de contrario no sólo no abdicarán de
su ideología política (como parece ser obvio) en el ejercicio del cargo, sino
que llegarán a ser verdaderos prevaricadores al servicio de la ideología o interés
del grupo político que los propone. Esta es la realidad, y basándose en ella, parece
también obvio que, respetando la norma constitucional citada, lo mejor es
cambiar el sistema de elección de doce de los miembros del Consejo General del
Poder Judicial para volver al sistema derogado hace ya años del nombramiento por
las Cámaras de los propuestos por los propios miembros de la judicatura.
Pero, para ello hay que demostrar con hechos
que verdaderamente no se quiere manipular la Justicia. Difícil lo veo.
Valentín Cortés