Miércoles 3 de Junio de
2015
Otra vez “Fuenteovejuna, señor”
Siento un enorme cansancio de explicar lo que a mí me parece obvio.
Para mi es obvio que se cometió un delito en la final de la Copa del Rey,
cuando se pitó a éste y al himno nacional y cuando se desplegó aquella pancarta.
Está en el Código Penal y no voy a volver ahora sobre ello. Otra cosa es que se
pueda probar que una persona concreta cometió ese delito.
El nacionalismo catalán, lo dije la última vez en mi opinión de 25 de
Noviembre de 2014, es muy aficionado a algo muy castellano: el efecto Fuenteovejuna:
Si el delito lo cometen personas
integradas en la masa ya no es delito: esa parece ser la consigna.
Por eso los representantes de la masa, incluso futbolistas,
presidentes de clubes, autoridades varias y hasta gente de andar a pie (que
antes se decía “clase de tropa”) hablan pomposamente de la libertad de expresión,
(de la que no se puede privar a la masa), porque le han dicho, para que no
cunda la preocupación, que es la forma de que lo que hacen no sea delito.
Pero lo es aunque no podamos probarlo en su comisión individual.
Valentín Cortes